En un ejercicio de diseño que responde a la necesidad de vehículos eléctricos mucho mas eficientes exploro alternativas que mejoren el desempeño de la actualidad de estos vehículos en el mercado. Este ejercicio se enfoca en reducir el tamaño y peso del vehículo para solo satisfacer su función esencial: Transportar a una o dos personas con su equipaje del punto A al punto B con el menor gasto de energía posible. El factor más importante a contemplar en un vehículo capaz en carretera es su resistencia aerodinámica. Al reducir el tamaño optimizando su forma aerodinámica y reduciendo su peso al mínimo, se puede lograr un mejor desempeño con solamente una pequeña fracción de la energía que necesita un automóvil convencional para impulsarlo. Diseño automotriz con el enfoque de un diseñador de bicicletas. Una búsqueda por la total simplificación y la optimización de la ingeniería enfocada en la ultra eficiencia para encontrar la arquitectura y geometría del automóvil del futuro.

Tracción y dirección en las cuatro ruedas. Carrocería monocasco sin chasís con una sola puerta o techo que se abre por completo para entrar, cargar, descargar y salir del vehículo.

Un vehículo para dos ocupantes en disposición tándem. Si los dispusiéramos lado a lado incrementaría la superficie frontal del vehículo perdiendo mucho en eficiencia aerodinámica. Alargar el monovolumen en dirección del viento es mucho mejor que alargarlo perpendicularmente contra el viento.

Lecciones aprendidas en un túnel de viento virtual (Computer Fluid Dynamics o CFD) muestran consistentemente que una forma afilada en la parte de atrás del vehículo siempre reduce el arrastre aerodinámico.

Un vehículo para ciudad y carretera. Cuatro ruedas con llantas de motocicleta ofrecen mucho menos resistencia al rodamiento que usar llantas de automóvil convencionales.

Un volumen que ocupa un tercio de un automóvil compacto convencional con la forma que obedece al viento.